Mérida, Yucatán a sábado 20 de abril de 2024
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Aunque a lo largo de su administración el alcalde de Dzilam González José Concepción Martín Heredia ha estado envuelto en escándalos resulta que se quiere reelegir.
Martín Heredia es recordado por su mote de #lordalcalde porque el año pasado intentó sobornar a un policía que lo detuvo por manejar a exceso de velocidad y como el agente no cayó en su juego lo amenazó con solicitar su cese.
Este singular personaje pretende reeligirse como primer edil de Dzilam González aún cuando la Auditoría Superior del Estado no le aprobó sus cuentas.
Según el dictamen entregado al Congreso del Estado por la Asey correspondiente al ejercicio fiscal 2015 que se le practicó al Ayuntamiento de Dzilam González, aparece que el concejal no pudo comprobar millón y medio de pesos tan solo de septiembre a diciembre del citado año.
Como parte de las observaciones hechas por la Asey, de septiembre a diciembre del 2015 recibió la Comuna del citado municipio 200 mil pesos en donaciones; la Auditoria le pidió el acta de Cabildo en donde se aceptan los ingresos por donaciones, nunca se proporcionó.
En el mismo periodo el alcalde no pudo justificar $165 mil 500 por concepto de pagos con dinero de participaciones y de infraestructura en nóminas sin firmar.
También se detectaron pagos por compra de materiales de construcción y reparación por la cantidad de $77 mil 600; no se realizaron órdenes de servicio, bitácoras de trabajo, control de almacén, reportes fotográficos y recepción de trabajos que justifiquen el gasto.
Se detectaron pagos por $69 mil 900 para la compra de uniformes y accesorios pero no entregó la lista de beneficiarios con nombre, cargo y firma con su identificacion oficial que justifiquen el gasto.
Se detectaron pagos por $36 mil 300 por reparacion y mantenimiento de equipos de transporte, no proporcionó cotizaciones, control del parque vehicular y reportes de mantenimiento firmado por el responsable.
Se detectaron pagos por $40 mil por arrendamiento de una camioneta para la recoja de basura, no dio el acta de cabildo donde se autoriza el pago y reporte de los trabajos de esa camioneta.
De igual modo, se detectaron pagos por $30 mil 800 por servicios profesionales, científicos y técnicos, no ofreció solicitud, orden de servicio, contrato de prestación de servicios profesionales, constancia de recepcion y reporte de los trabajos realizados.
La Asey detectó pagos por $559 mil 900 por concepto de pago de combustible, no entregó bitacoras de gasolina firmadas por el responsable y en la factura no especifica dónde se compró el combustible.
Y como estos casos la Asey demostró que el alcalde no logró justificar muchos gastos, por lo que el PRI debería pensar seriamente si lo vuelve a postular ya que está encaminado a una derrota segura.