Vestidos y alborotados dejó Ivonne Ortega Pacheco a las decenas de priistas que renunciaron al tricolor para incorporarse a Movimiento Ciudadano como candidatos a diputados, pues hasta ahora no han recibido ni un quinto para hacer sus campañas.
Solo el ridículo hicieron los ex priistas que buscaron el “sueño naranja” pues lo único que lograron fue complacer a Ivonne en su capricho por dividir al PRI, pero realmente no tienen ninguna posibilidad de ganar ningún cargo.
La única ganona aquí fue la ex gobernadora, quien ya tiene en las manos su diputación federal plurinominal; pero los borreguitos que la siguieron se quedaron como los perros de las dos tortas.
Ivonne se salió con la suya al dividir al PRI, pero la borregada que la siguió soñando con ser legisladores de Movimiento Naranja descubrirán en dos meses que su sueño se convertirá en una pesadilla, al quedar en cuarto o quinto lugar de la preferencia electoral de los yucatecos.
Los muchachos y muchachas que con mucha ilusión abandonaron el PRI con la promesa de tener recursos para hacer su campaña para diputados locales o federales por Movimiento Ciudadano poco a poco observan que fueron engañados de manera vil.
Pues de los cientos de miles de pesos que les ofrecieron para sus campañas, si reciben 10 mil pesos para gastar en dos meses, es mucho.
Como siempre ocurre, quien sabe donde quedó el dinero para las campañas.
Total, Ivonne ya consiguió lo que quería. Los borregos que se frieguen.