Hoy empiezan las campañas electorales de candidatos a diputados federales, y con ellas las mismas promesas de siempre por parte de los políticos.
Para nadie es un secreto que estos tiempos son tiempos de ofrecimientos, promesas, frases bonitas, abrazos, etcétera.
Sin embargo, una vez que los candidatos ganan se olvidan totalmente de la gente, es el caso de la priista María Ester Alonzo Morales, quien fue premiada por el PRI como candidata nuevamente del distrito 02 federal, a pesar que jamás regresó a su demarcación la primera vez que llegó a la Cámara Baja.
El 2020,-el peor año de la historia- María Ester Alonzo, así como todos los políticos, brillaron por su ausencia en sus distritos, todos abandonaron al pueblo.
En el caso de la esposa de Enrique Magadán jamás visitó a la gente que dice representar, siempre con la excusa de la pandemia por el coronavirus.
Ahora que es abanderada nuevamente ya no tiene temor de contagiarse, ahora sí abrazará y besará a toda la gente que encuentre en su camino, aunque cuando gane jamás la vuelvan a ver.