Bastante cómodo está Víctor Merari Sánchez Roca cobrando como dirigente del Comité Municipal del PAN en Mérida, a pesar de que nadie votó por él para que ocupe ese cargo y nadie sabe lo que hace.

Como se sabe, hace dos años y medio fue electa Cecilia Patrón Laviada como presidenta del CDM de Acción Nacional en la capital yucateca; el secretario en su planilla era Víctor Merari.

A principios del 2021 Cecilia renunció al cargo para contender por el distrito 04 federal, mismo que ganó en las urnas, por esa razón el controvertido ex diputado Merari se convirtió en dirigente del CDM desde hace un año.

En esos 12 meses nadie sabe lo que ha hecho; sobra decir que él no fue el responsable del triunfo del PAN en el Ayuntamiento de Mérida ni del éxito electoral del los candidatos a legisladores estatales ni federales.

De hecho, ni el Comité Municipal ni el Estatal de Acción Nacional influyeron para que ese instituto político haya arrasado en las urnas hace un año.

También hace un año, un periódico local informó que Merari, en su calidad de legislador local, era proveedor de lujo para dependencias estatales y gobiernos municipales.

El entonces diputado usaba a intermediarios para vender bienes y servicios a dependencias estatales y ayuntamientos, siendo quizá el más emblemático el Ayuntamiento anterior de Kanasín, en manos del PRI.

De tanta vergüenza que sintieron los panistas hace un año con ese escándalo ningún candidato invitó a Sánchez Roca a su campaña en su calidad de dirigente municipal y diputado, pues lejos de dar solo iba a restar votos.

Desde que concluyó la legislatura pasada Víctor Sánchez se quedó esperando a que alguna autoridad le dé una buena chamba en la administración pública, pero como está “quemado” nadie lo va a colocar. Además, de que su esposa es funcionaria pública.

En el 2018, durante una entrevista con un representante de este medio de comucación dijo que para él la política no es un negocio, que sus empresas le dejan mucho más dinero que ser regidor o diputado.

Además precisó que él no es gente de confianza ni de Renán Barrera ni de Mauricio Vila, solo de Raúl Paz Alonzo.

Para quienes no lo sepan, Víctor Merari es compadre de Cecilia Patrón Laviada y de Raúl Paz Alonzo, ambos legisladores federales.

La relación se explica de esta forma: Víctor Sánchez fue pareja de la panista y actual funcionaria municipal Nora Pérez Pech, con que procreó un hijo. Raúl Paz y Cecilia Patrón fueron los padrinos de bautizo del hijo de Nora Pérez y Merari.

En el 2015 Nora Pérez tuvo la oportunidad de ser regidora gracias a sus palancas, pero le dejó esa posición a quien era su pareja en ese entonces. Por eso Merari fue edil, y en ese periodo creó todas sus empresas.

También se suma que tanto Cecilia Patrón como Raúl Paz meten las manos al fuego por su compadre; de hecho, si alguno de ellos llega a ser alcalde de Mérida colocará a Merari como tesorero para que maneje las arcas municipales.