Mérida, Yucatán a sábado 04 de mayo de 2024
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El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, anunció este miércoles que el próximo 5 de febrero presentará una reforma para prohibir el maltrato animal entre el paquete de iniciativas constitucionales que enviará al Congreso de la Unión.
"Vamos a enviar una reforma constitucional para que los animales sean considerados seres sintientes y, por lo tanto, tengan derecho a la vida, a la protección y a la no crueldad", dijo López Obrador en su conferencia de prensa matutina.
La reforma, que se presentará ante el Senado de la República, busca modificar el artículo 4 de la Constitución para incluir a los animales como seres sintientes. Esto significa que, al igual que los humanos, los animales tienen la capacidad de experimentar emociones y sentir dolor.
La reforma también busca establecer penas más severas para las personas que cometan actos de maltrato animal. Actualmente, la Ley General de Protección a los Animales establece penas de hasta dos años de prisión y multas de hasta 700 mil pesos para quienes cometan actos de crueldad animal.
La propuesta del Presidente de México ha sido recibida con beneplácito por organizaciones de protección animal, que llevan años luchando por la prohibición del maltrato animal en México.
"Esta reforma es un paso importante en la protección de los animales en México", dijo Arturo Aguilar, presidente de la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies (AMMVEPE). "Es un reconocimiento a la importancia de los animales en nuestras vidas y a su derecho a vivir libres de crueldad".
La reforma del ejecutivo federal también ha sido criticada por algunos sectores, que consideran que es innecesaria o que podría ser contraproducente.
"Esta reforma es una medida populista que no va a solucionar el problema del maltrato animal", dijo José Luis Gutiérrez, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Ganado (ANPG). "El maltrato animal es un problema cultural que no se va a resolver con una reforma constitucional".
Sin embargo, la reforma del presidente López Obrador cuenta con el apoyo de la mayoría de la población mexicana, según una encuesta reciente. El 75% de los mexicanos encuestados está a favor de prohibir el maltrato animal en la Constitución.
El Congreso de la Unión tiene 90 días naturales para analizar y discutir la reforma del presidente. Si es aprobada por dos terceras partes de los diputados y senadores, se convertirá en ley y entrará en vigor a partir de su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
Productores ganaderos
Algunos productores ganaderos han criticado la propuesta de López Obrador. Consideran que es innecesaria y que podría ser contraproducente.
"Esta reforma es una medida populista que no va a solucionar el problema del maltrato animal", dijo José Luis Gutiérrez, presidente de la ANPG. "El maltrato animal es un problema cultural que no se va a resolver con una reforma constitucional".
Público en general
Una encuesta reciente realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) encontró que el 75% de los mexicanos está a favor de prohibir el maltrato animal en la Constitución.
Posibles consecuencias
La aprobación de la reforma de López Obrador podría tener varias consecuencias positivas para los animales en México.
Aumento de la protección legal de los animales: La reforma convertiría a los animales en seres sintientes, lo que les otorgaría mayores derechos legales.
Incremento de las penas para los actos de maltrato animal: La reforma establecería penas más severas para las personas que cometan actos de maltrato animal.
Mayor conciencia sobre el maltrato animal: La reforma podría ayudar a aumentar la conciencia pública sobre el maltrato animal y su impacto negativo en los animales.
Sin embargo, la reforma también podría tener algunas consecuencias negativas.
Posibles dificultades para su aplicación: La reforma podría ser difícil de aplicar de manera efectiva, especialmente en zonas rurales o remotas.
Posibles costos económicos: La reforma podría generar costos económicos para el gobierno, ya que tendría que invertir en programas de educación y protección animal