Dos jóvenes yucatecos triunfaron en la décima temporada de Shark Tank México.

Se trata de Marco Herbert y Cristina Camelo, dueños de “Yiitsché”, negocio dedicado a la fabricación, distribución, venta y aplicación de chukum.

Los emprendedores pedían 1.5 millones de pesos por el 15 % de su compañía, lo que significa que está valuada en 10 millones de pesos.

Explicaron que el chukum es un árbol endémico de la Península de Yucatán, el cual se utiliza para extraer la resina del mismo.

La resina al mezclarse con la masilla hecha a base de piedra caliza se convierte en una pasta que se usa en piscinas, baños, recámaras, cocinas y diferentes tipos de acabados.

Realmente funciona como aislante térmico, y en Yucatán es muy popular. De hecho, fue usado como recubrimiento arquitectónico por los mayas.

Marco y Cristina explicaron que su empresa nació en Mérida, pero ya venden en seis estados del país, además de que tienen clientes de Costa Rica, Francia y España.

Los emprendedores recibieron muchas felicitaciones por parte de los inversionistas Mauricio Schwartzmann, Alejandra Ríos, Miguel Layún y Marissa Lazo.

Sin embargo, ellos mismos dijeron que, aunque les gustó mucho el producto no sabían cómo ayudarlos ya que no tienen conocimientos sobre impermeabilizantes.

No obstante, el tiburón Simón Cohen aceptó la propuesta tal como pidieron Marco y Cristina, sin regatear un solo peso: 1.5 millones de pesos por el 15 % de su compañía.

Simón es experto en logística internacional, lo que podría ayudar a que Yiitsché pueda exportar aún más.

“Vamos a pasarla a toda madre” fue la frase con la que Simón cerró el “deal”, que dejó muy satisfechos y contentos a los emprendedores yucatecos.